martes, 4 de diciembre de 2012

Monix Parte II



Después de tener un orgasmo, Monix se queda pensando y mirando el techo. Sólo pensando, siempre le ayuda eso; el llegar al clímax porque estira los brazos o se queda inmóvil, pensando en qué ha hecho mal, por qué vive así, de esa manera.

Monix está inmóvil, desnuda, sin que sienta frio, el clima es bastante agradable para su cuerpo desnudo. Esta tendida sobre su cama. Sus pequeñas tetas apuntando al cielo. La piel suave y blanca como un durazno. Piensa en los orgasmos que ha tenido a través de su vida y en el que acaba de terminar. Exhala un suspiro que parece irse hacia el infinito, traspasando el cielo y yéndose hacia el universo. ¿Qué es un orgasmo? Dice dentro de su cabeza, ¿por qué se siente así?, ¿Quién decidió que fuera de esta manera?, ¿serán acaso reacciones químicas que se liberan del cuerpo y del cerebro? Todas estas preguntas inundan su cabeza, sin darles mucha importancia, sólo están ahí y sin pensar demasiado en ello. Monix mira su cuerpo, está convencida de que no es mal parecida y sin embargo se pregunta por qué está sola, por qué vive en soledad.

¡Y sin embargo!, para Monix el sexo no es tan importante, sólo es una de las tantas cosas hermosas de este planeta.

¿El paraíso será como un orgasmo o será como la heroína?

1 comentario:

Anónimo dijo...

La respuesta debe ser dificil. Nunca me he metido heroína pero un orgasmo es chingonsisimo.